TECNOLOGÍA Y CIENCIA |
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Encuentran una vulnerabilidad en circuitos que fuerza a cambiar antes el dispositivo, reside en chips de alto rendimiento que pueden provocar fallos en el sistema de comunicaciones del circuito y acortar su vida útil si se infecta con una carga de trabajo adicional con intenciones maliciosa.
Los sistemas de comunicación de los procesadores podrían ser por su diseño los responsables de la ralentización
La obsolescencia programada es un término que poco a poco comienza a conocerse, así como el grave problema que supone para los consumidores en muchos productos, muchos de ellos relacionados con la electrónica y los fabricantes lo saben. Todos conocemos ya los dispositivos más afectados como las impresoras, cámaras de fotografías o televisores, que suelen dejar de funcionar por las buenas, que en teoría deberían tener una larga vida, pero que todos sabemos que suelen fallar casi a la vez pasada la garantía o un número de horas de funcionamiento demasiado exacto. Igualmente pasa con los móviles y los ordenadores, son ya otro clásico, que con el paso del tiempo se van volviendo más lentos e inmanejables a través de las actualizaciones de software, cuya misión teórica es mejorar su rendimiento y prestaciones, pero que a la hora de la verdad tiene otra finalidad en muchos casos. . Las excusas de los fabricantes son de todo tipo, alegando buscar ahorro de energía, compatibilidad o motivos de seguridad, pero todos sabemos que cualquier actualización conlleva un deterioro o ralentización por alguna parte. Los fabricantes necesitados de que sigamos comprando, mezclan toda clase de actualizaciones “buenas y malas” y desarrollan toda clase de estratagemas para justificar lo que ya todos sabemos y no ser cazados. Ahora parece que han pillado nuevos “trucos” que podrían emplear para hacer que nos vaciemos el bolsillo de nuevo, han descubierto que estos mecanismos están presentes dentro de los propios chips. Esto es lo que ha encontrado un equipo de investigadores de la Washington State University e investigadores de la Universidad de Nueva York y la Universidad de Duke financiado por la National Science Foundation y la Oficina de Investigación del Ejército de los Estados Unidos El equipo de la WSU ha descubierto una vulnerabilidad desconocida hasta ahora en chips de alto rendimiento a nivel de hardware (es decir algo, que en teoría se diseña físicamente desde un primer momento) y que llevaría a provocar fallos en el sistema de comunicaciones del chip y acortar su vida útil infectándolo con una carga maliciosa de trabajo extra. El equipo, dirigido por el profesor Partha Pande y Janardhan Rao Doppa, profesor asistente en la Escuela de Ingeniería Eléctrica y Ciencias de la Computación, informaron sobre el trabajo realizado durante el reciente Simposio Internacional sobre Redes, Chip IEEE / ACM 2018 Los investigadores al ser conscientes de la obsolescencia programada, precisamente estaban intentando comprender a que estrategias recurrían los fabricantes para ralentizar nuestros móviles. Es muy normal que esto se haga a través de actualizaciones de software. No hace falta a estas alturas que te contemos que ocurre quince días después de una actualización de sistema operativo o cuándo sencillos programas y componentes del SO comienzan a pesar megas y megas ¿verdad?
Esta figura muestra un chip con múltiples núcleos en 3D donde los núcleos de procesamiento están conectados a través de enlaces verticales. Washington State University /WSU INSIDER
El objetivo es sencillo: forzarnos a comprar nuevos dispositivos sin que nos demos cuenta de que todo ha sido minuciosamente preparado para pasar desapercibido o que no podamos generar acusaciones fáciles de probar (Realmente no siempre, cada vez se hace con más descaro y nuestra complicidad) Hasta ahora la mayor parte de las investigaciones se habían limitado al estudio del procesador, la memoria o a la circuitería, pero no a los circuitos implicados con el sistema de comunicaciones, que es la parte de la estructura encargada de conectar el dispositivo con todo lo demás. El proceso es progresivo y silencioso, cuando el sistema de comunicaciones comienza a fallar, todo el sistema se ve afectado en una cadena muy compleja de ralentizaciones. Los procesadores de alto rendimiento que montan los ordenadores y teléfonos móviles utilizan una gran cantidad de sistemas interconectados que procesan los datos en paralelo, así que la comunicación entre todos esos chips es vital que sea óptima. Si lo pensamos bien este modelo de funcionamiento se puede llevar a cualquier máquina o dispositivo que lleve dentro un “ordenador” y tenga que manejar una gran cantidad de interconexiones. Pues bien, los investigadores diseñaron tres ataques contra el sistema de comunicaciones como objetivo y se dieron cuenta que el sistema de comunicaciones era especialmente vulnerable y con tendencia a fallar. El mecanismo era sencillo, introdujeron cargas de trabajo adicionales que aumentaron el “estrés” inducido por electromigración y el ruido de las interferencia. Los investigadores encontraron que un número limitado de enlaces verticales cruciales en el sistema de comunicación eran particularmente vulnerables a fallar. Ya que esos enlaces conectan los procesadores a modo de pila y les permite hablar entre ellos, pero en la práctica es muy difícil ver ninguna modificación aparentemente. ¿Cómo era posible que esos fallos no estuvieran previstos y produjeran una reacción en cadena tan “eficaz”? Simplificando: Se dieron cuenta que para acabar con la vida de un dispositivo basta con manipular sigilosamente el sistema de comunicación para que empiece a fallar todo el aparato. A partir de ahora el equipo de la Washington State University, va a centrar sus esfuerzos en encontrar el camino para reducir el problema, con defensas automatizadas y algoritmos que detecten y repelan estos intentos de acabar con la vida del equipo Pero es un problema muy difícil de combatir, los fabricantes no paran de diseñar nuevos circuitos de comunicaciones y “puertas traseras” difíciles de detectar, tan difíciles como encontrar una aguja en un pajar. Lo peor de todo es que no paran de diseñar nuevos “pajares”, para cuando se detecta una vulnerabilidad el usuario hace tiempo que padece un dispositivo en mal funcionamiento, no ha podido encontrar una solución sencilla y ha optado por comprarse un nuevo móvil o dispositivo con el que volverá a tener el mismo problema. Aunque cada vez son más las protestas y manifestaciones para prohibir este tipo de prácticas, que se mejore la calidad de los productos y sean más fáciles de reparar, lo cierto es que estamos recorriendo el camino contrario. Te puede interesar:
Autor: Iván Reyes C
Temas relacionados: CiberSeguridad, Curiosidades De La Tecnología, Defendiendo A Los Consumidores, Electrónica, Obsolescencia Programada, Seguridad Informática, Tecnología. Reconocimientos y más información sobre la obra gráfica ADVERTENCIA: En este foro, no se admitirán por ninguna razón el lenguaje soez y las descalificaciones de ningún tipo. Se valorará ante todo la buena educación y el rigor sobre el tema a tratar, así que nos enorgullece reconocer que rechazaremos cualquier comentario fuera de lugar.
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